Saber que su apellido era Piedrahíta era fácil, simplemente había que hacer un zoom en la fotografía y leer en su uniforme (foto 1067).
En aquel entonces la central de los agentes de tránsito quedaba en los bajos de la Alcaldía y era común encontrarse con grupos de ellos caminando entre el tumulto.
Para conocer la historia hubo que encontrar al agente. Una pesquisa que comenzó cuando Diego Arango declaró que un tío suyo había sido azul y que seguramente conocería a los que entonces trabajaban en el Tránsito de Medellín.
La sorpresa es que no sólo sabía quién era, sino que podía localizarlo hoy en día. Ahora trabaja para la Secretaría de Gobierno.
El día que concertamos la cita nos contó que nunca reclamó la foto y se sorprendió con nuestra llamada. También nos dijo que su compañero, el que aparece al lado izquierdo de la foto, de apellido Toro, cumpliendo con su trabajo, fue asesinado en la Glorieta de Carabineros.